Un año más en el quinto domingo de cuaresma, las puertas de la Capilla de Nuestra Señora de la Piedad se han abierto, para que todos los hermanos y devotos pudiesen contemplar, y orar ante nuestra Madre.
Un año más en el quinto domingo de cuaresma, las puertas de la Capilla de Nuestra Señora de la Piedad se han abierto, para que todos los hermanos y devotos pudiesen contemplar, y orar ante nuestra Madre.